domingo, 31 de agosto de 2008

Trabajos, bohemios y viajes

Dejemos claros los concetos: después de haber estado estudiando en dos países extranjeros, tengo cada vez más claro que la universidad en España, en términos generales, no favorece que uno tenga idea de lo que hace una vez acabada la carrera. No voy a entrar en detalles porque vosotros ya lo sabéis. Todo esto viene a cuento de que aquí alguien, dependiendo de su carrera, puede tirarse 3 años sin hacer un examen. ¿La contrapartida? Está claro: te tupen a trabajos. ¿Qué preferís? Yo los trabajos, gracias. Siempre lo he dicho y he dicho las razones. El problema es que ahora mismo tengo un cuello de botella con la entrega de trabajos, y esta semana toca petarlo. Así, tengo que hacer un resumen comentado, una monografía del águila de cola acuñada y preparar un seminario sobre la idoneidad de conservar grandes carnívoros. ¿Qué tipo de ventajas puede llevar estar con tanta carga de trabajos? Pues eso, le petan a los examenes y con un poco de suerte estoy de vacaciones de verano a principios de noviembre. Tomad una foto del perico monografiado de propina:


En otro orden de cosas, para el 21 de septiembre tengo un campo de trabajo de vertebrados durante una semana, una especie de manejo y conservación, pero sin Peris. El sitio debe ser como aquel al que ibais, porque no hay ni cobertura para móviles (aah, beatus ille...). Había varios proyectos para desarrollar en grupo, y ando en uno relacionado con la actividad de los micromurciélagos.
En cuanto al resto de salidas, una a la Great Ocean Road hace 2 semanas, y hace una, a una cordillera cerca de la ciudad llamada Dandenong Ranges. Por supuesto, lo gordo vendrá a partir de noviembre.

He de decir que ya me he dado un garbeo por otros barrios de la city: Little Italy, y Fitzroy, que es una pasada de barrio: es una especie de barrio bohemio, lleno de cafés, restaurantes asiáticos y griegos, galerías de arte, peluquerías, graffitis en todas las calles... y por supuesto bares: bares con música potable y en los que no hay que ser un hijo de narcotraficante para poder entrar. Ya sabéis, bares con terraza, con baños unisex, venga ya sabéis a qué bares me refiero... En uno de ellos había un dj pinchando funk y afrobeat, y cuando cerraron el bar, estuve hablando con él, resultando que era japonés, y me regaló un cd con el set!

Para todos aquellos cansinos que andaban pidiendo fotos, ya he hecho las pertinentes gestiones: http://www.photoblog.com/marduk/ Picando aquí podéis ver fotos de lamentable calidad, porque lo habéis querido.

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